El horror de la guerra no puede ocultar algunos gestos aislados de humanidad. El día de Navidad de 1914, cuando la guerra llevaba aún poco tiempo, en algunos frentes soldados de ambos bandos confraternizaron intercambiando canciones, comida, saludos y fotografías. En algún lugar llegó a jugarse un partido de fútbol entre soldados de ambos ejércitos
Los altos mandos militares de ambos bandos intentaron que hechos como estos no volvieran a repetirse y censuraron las informaciones sobre los mismos. Después de la tregua los que habían compartido momentos de paz y añoranzas volvieron a enfrentarse.
A continuación se inserta un vídeo docuemntal sobre esta cuestión
Y un fragmento de la película Feliz Navidad recrea, de otra forma, este curioso suceso:
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